VENTAJAS DEL RÉGIMEN DE ESTIMACIÓN OBJETIVA O MÓDULOS

Si estás empezando como autónomo o has decidido lanzarte a emprender en un nuevo negocio, te interesa conocer el régimen de estimación objetiva.

El régimen de estimación objetiva, también conocido como módulos, es una modalidad simplificada de tributación que el autónomo puede aplicar en su IRPF. Este enfoque busca facilitar la declaración de impuestos para pequeños empresarios y profesionales, eliminando la necesidad de llevar una contabilidad detallada.

La tributación por módulos es una de las 3 alternativas que tienen los autónomos para tributar IRPF. Las otras formas son el régimen de estimación directa y el de estimación directa simplificada. Sin embargo, este régimen de estimación objetiva no es aplicable a todos los autónomos, por lo que no puede acogerse a él cualquier profesional. Te contamos cómo funciona.

¿Qué es el régimen de estimación objetiva?

Para entender en qué consiste este método de cálculo del rendimiento de la actividad, te contamos las principales características del régimen de estimación objetiva.

Cálculo mediante índices objetivos:

En lugar de realizar una contabilidad pormenorizada de todos los ingresos y los gastos, este régimen utiliza índices preestablecidos (indicadores objetivos de cada tipo de negocio, como superficie del local, mesas, carga del vehículo, personal, consumo eléctrico…) para determinar los ingresos y gastos deducibles (y, por tanto, el rendimiento estimado). Con ello, se simplifica mucho la carga administrativa para el contribuyente.

Estos indicadores o módulos son aprobados previamente mediante Orden por el Ministerio de Hacienda, que regula este régimen.

Ingresos máximos:

Este régimen de estimación objetiva o módulos se aplica a aquellos contribuyentes cuyos ingresos anuales no superan ciertos límites establecidos por la legislación fiscal. Esta limitación asegura que el régimen beneficie principalmente a pequeños empresarios y profesionales.

Sectores específicos:

Este régimen suele ser más común en actividades como la hostelería, comercio minorista, transporte, entre otros. Cada sector puede tener sus propios parámetros para el cálculo de impuestos. Las actividades susceptibles de este régimen vienen detalladas en la Orden que desarrolla el régimen.

¿Cuáles son los requisitos para acogerse al régimen de estimación objetiva?

Los requisitos para poder acogerse al régimen de estimación objetiva tienen que ver con el nivel de facturación y el tipo de actividad que se desarrolla, ya que no puede aplicarse este método para cualquier actividad.

Límites de facturación:

Los contribuyentes deben cumplir con los límites establecidos en cuanto a ingresos anuales para poder optar por este régimen simplificado. Los límites para 2024 (prorrogados transitoriamente los límites de 2016) son: 250.000 euros para el conjunto de actividades y 125.000 euros para las actividades en las que es obligatorio emitir factura; salvo si es una actividad agrícola, ganadera o forestal, en la que el límite se eleva a 250.000 euros.

En estos niveles de ingresos indicados no se incluyen las subvenciones, las indemnizaciones, el IVA, ni el recargo de equivalencia, en su caso.

Límite en volumen de compras:

Excluyendo las compras de inmovilizado, no deben superarse el importe de 250.000 euros anuales (sin IVA)

Actividades compatibles para acogerse al régimen de estimación objetiva:

El régimen de módulos no puede aplicarse a todas las actividades. Está restringido a algunas actividades económicas recogidas en la Orden del ministerio antes citada.

Adicionalmente, las actividades económicas se deben desarrollar únicamente en territorio nacional. Y todas las actividades realizadas deberán estar en este régimen; no se puede aplicar a la vez el régimen directo en ninguna actividad.

Además, como requisito previo, el autónomo no debe haber renunciado expresamente o tácitamente a poder aplicar el régimen de módulos.

¿Me interesa acogerme a este régimen? ¿Cuáles son las ventajas del régimen de estimación objetiva?

Para los empresarios individuales y profesionales que cumplan los requisitos indicados, este régimen tiene importantes ventajas, ya que facilitan la gestión administrativa, contable y fiscal.

Simplicidad administrativa:

Al no requerir una contabilidad detallada, los contribuyentes pueden reducir significativamente el tiempo y los recursos dedicados a la gestión fiscal.

Reducción de carga fiscal:

Para ciertos contribuyentes, este régimen implica una menor carga fiscal comparado con otros métodos de tributación. Esto es porque se basa en estimaciones simplificadas. No se paga en función de ingresos y gastos, sino en función de determinados indicadores. Según estos indicadores, se determina una cantidad fija de pago. Ejemplo de esos indicadores: superficie del local, empleados, consumo eléctrico…

Menor riesgo de errores contables:

Al depender de índices objetivos, se reduce la probabilidad de olvidar contabilizar alguna factura de gastos o de cometer errores en la contabilidad, que se trasladan a la declaración de impuestos, pudiendo generar problemas con Hacienda.

Es fundamental tener en cuenta que, a pesar de las ventajas, no todos los autónomos pueden optar a este régimen, puede no ser la mejor opción para tributar, y es recomendable evaluar su idoneidad en función de las características y necesidades específicas de cada negocio.

Si necesitas asesoramiento para tu actividad, no dudes en contactarnos. Somos una asesoría fiscal, contable y laboral especializada en autónomos y pymes.

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